Estos humildes provincianos eran vendedores ambulantes. Una de ellas tenía talento para los negocios y decidió empezar a vender a otros negocios. Su arranque fue al decidir alquilar un local para montar su primera bodega de productos para abastecer a los negocios cercanos. Poco a poco fueron creciendo, compraron su primero local para bodega, y ahora son dueños de varias bodegas y camiones para repartir los productos.
Este ha sido un éxito de emprendedores actuando como mayoristas de productos. El talento y un olfato natural para ver oportunidades los han conducido al éxito.